La Gloria fue el único que ganó entre los cordobeses
La victoria de Instituto frente a All Boys en Floresta fue el único festejo cordobés del fin de semana. Belgrano perdió ante San Martín y se quedó sin DT, Talleres perdió pero clasificó, y Estudiantes igualó ante Chacarita.
Belgrano: Sigue sin encontrar el rumbo
El equipo celeste perdió 1 a 0 en Alberdi frente a San Martín de Tucumán. El ahoraex entrenador Alejandro Orfila optó por colocar en cancha un conjunto integrado mayoritariamente por las incorporaciones que él había solicitado, pero no obtuvo una respuesta positiva
Cuando apenas se jugaba un cuarto de hora, San Martín se puso en ventaja y dejó al descubierto las falencias de Belgrano. El equipo cordobés mostró nuevamente una alarmante falta de juego en sus volantes y casi no generó peligro en el arco de Arce durante todo el partido.
Las actuaciones de Miño, Asprea y Lima por citar algunos casos, estuvieron lejos de ser la esperadas. Incluso estos jugadores parecieron no estar con el ritmo físico y futbolístico necesarios para integrar el equipo titular.
En la etapa complementaria y con el partido cuesta arriba, Orfila ordenó los ingresos de los jugadores propios del club, algo que ya sucedió en cotejos anteriores. La inclusión de Zapelli, Barbero y Sánchez no pudo torcer el rumbo de una tarde que indicaba el inevitable final de un ciclo.
Instituto: con más equilibrio logró el primer triunfo.
El equipo dirigido interinamente por la dupla Sarría/Jimenez derrotó 2-1 a All Boys en condición de visitante. El albirrojo mostró un sistema de juego más equilibrado con la inclusión de un segundo volante central, lo que le permitió controlar el trámite durante gran parte del partido.
En la mitad de cancha fue determinante la gran actuación de Garro, que fue incontrolable para los volantes locales. La ubicación de Watson y Faurlín cerca del volante pampeano le permitió a Instituto poblar correctamente un sector del campo de juego donde se gobiernan los partidos.
Las actuaciones de Villarruel y Mateo por las bandas fueron interesantes. Este último incluso anotó el segundo gol. A diferencia de partidos anteriores ambos futbolistas arrancaron sus acciones desde más atrás, lo que les posibilitó tener más protagonismo en el juego y al equipo conducir el balón con más criterio.
En defensa el albirrojo lució mayor solidez, en este aspecto la inclusión de Gómez en la zaga central le dió mayor seguridad al equipo. Por los laterales, tanto Ferreyra como Mazur no se proyectaron tanto como en otros partidos y esto les permitió ser más ordenados en su labor defensiva.
Talleres: Le faltó intensidad y fue superado
El equipo que dirige Medina cayó 1 a 0 en su visita a Lanús, se vio superado en intensidad y determinación por un rival que estaba obligado a ganar para mantener chances de clasificar a la siguiente instancia. El entrenador uruguayo eligió nuevamente la rotación de jugadores.
Desde el inicio del partido, Lanús se mostró superior a Talleres y comenzó a generar situaciones de peligro para el arco defendido por Díaz. Rápidamente el local se puso en ventaja mediante un penal convertido por Sand. Al equipo cordobés le costó mucho meterse en partido.
A la línea de volantes albiazul integrada por Mauri, Mac Allister y Soñora le costó discutirle la posesión del balón a los mediocampistas de Lanús. Más le costó a Talleres crear situaciones de gol, a tal punto que casi no generó acciones de riesgo para la valla de Morales.
Aunque le alcanzó con lo justo para clasificar a cuartos de final en el torneo local, con el paso de los partidos se hace más evidente el rendimiento dispar de Talleres generado por la inevitable rotación de futbolistas; sobretodo de mitad de cancha hacia adelante.
Estudiantes: un empate que no sirve de mucho
El equipo que conduce Acuña empató 1 a 1 frente a Chacarita en condición de local, luego de recuperarse en el marcador tras empezar perdiendo. Pudo haberlo ganado como también perdido en un partido que durante largos pasajes fue de ida y vuelta.
Estudiantes muestra en cancha un sistema táctico con cierta e interesante elasticidad, en la defensa Bottino se mete entre los centrales para formar una línea de cinco y esto le permite soltar a los laterales Adín e Ihítz ,que suelen adelantarse con criterio.
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