Gallardo está decidido a llevarse al “10” de Belgrano. Por ahora “Oreja” se sigue entrenando en Villa Esquiú.
El 6 de julio Belgrano rompió el mercado. A menos de un mes de la partida de un ídolo, como el “Ruso” Zielinski”, otro volvía a ponerse la “Celeste”.
Suárez llegaba del Anderlecht, en el que había ganado 8 títulos en 8 temporadas y en el que había sido goleador del torneo belga en 2011, y recibido el premio al mejor jugador en 2012.
Con todos esos pergaminos, y con la incógnita de su estado, “Oreja” volvió al club que lo vio nacer profesionalmente.
Si bien grupalmente las cosas no salieron de la mejor manera y Belgrano comenzó desde aquella temporada hundirse cada vez más en la zona de descenso, individualmente siempre el que más se destacó en un equipo con muy pocas luces.
Y ese Súarez quiere Gallardo, aquel que pueda brillar pese a que su equipo no lo haga en un plantel con otras características que podrían potenciar al delantero.
Los números, desde su vuelta al “Pirata”, son buenos:
67 partidos jugados
1o goles
9 asistencias
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